El 1º de octubre de 2009, “El boliche del Toto Latorre cerró sus puertas y el dueño se fue con su ritmo canastero “rumbeando pa´ la eternidad…” – Desde entonces el canto del pueblo había perdido “una de sus semillas” al decir de Walter Bique. Han pasado 7 años del fallecimiento de Dinarte Latorre Pintado y las guitarras siguen entonando canciones de su autoría. El bar, “donde la bohemia se recostaba al hormigón”, cerró y no hubo ninguna reacción oficial para mantener ese ícono de nuestro canto ciudadano como tampoco ningún escenario lleva su nombre, pero eso poco importa a la gente del pueblo; el Toto y su bar sigue en la memoria de unos cuantos coterráneos y sus canciones son entonadas en escenarios nacionales e internacionales.
El boliche cerró y se llevó a Severo Núñez, Domingo Pietrafesa, al “Negro” Serpa y su violín, al Curita Mundo, al “Flaco” Ferreira, a Germán Rodríguez, al Guito Marrero, a Juancito Rodríguez, al Beto García, al “Hijo Zufriategui Acosta”, al Bebe Manzi, al “Chiquito” García, a Abayubá Rodríguez, al “Macanudo” Fernández, al “Nenito” Viana, a Juan Carlos Rosas, al “Teti” Albernaz, a “Lucho” Sánchez, al Buey Coyant, a “Sosita” el mecánico, a Alvarito Rivero, al “Botafogo” y a unos cuantos otros parroquianos que encontraban en el Boliche del Toto su lugar de arte y amistad.
El Toto Latorre cumpliría el 23 de octubre, 91 años y se murió un 1º de octubre, precisamente, él como músico eligió el Día de la Música para irse de gira. Hoy tras el mostrador de los cielos estará con su esposa Elsa, preguntando ¿qué vas a tomar? Y su guitarra esperando…el Rumbeando pa´l Quiebra Yugos”…
Esto no fue nada más que un recordatorio para un guitarrero del pueblo y su boliche en este órgano representativo del pueblo.
– Palabras del edil Gustavo Bornia en la Junta Departamental de Tacuarembó
Sé el primero en comentar