ALCOHOL y DROGAS: Consumo en adolescentes

Que los padres sean, o no, permisivos impacta en el consumo.

El primer contacto del adolescente con el alcohol y otras sustancias, tiene que ver también con la casa: a más permisividad más consumo.
El resultado de la IX encuesta nacional sobre el consumo de drogas en estudiantes, realizada a adolescentes entre 13 y 17 años de edad, que concurren a liceos públicos y privados y a UTU, habla de un descenso en el consumo de tabaco, no así de otras drogas. 

Apu.uy conversó con la socióloga Jessica Ramírez, integrante del Observatorio Uruguayo de Drogas (OUD) que realizó la encuesta con la Junta Nacional de Drogas (JND). El trabajo se hizo en el 2021 y se presentó recientemente.
De acuerdo a los datos recogidos, entre los adolescentes cuyos padres toleran el consumo de alcohol, el “65,6%” ha tenido uno o más episodios de abuso de alcohol en los últimos 15 días, en tanto baja a “51,1%” entre los adolescentes que viven en hogares donde no toleran el consumo de bebidas alcohólicas en sus hijos.
En el caso de la marihuana “cuando los padres (o referentes adultos) no toleran el consumo, se encuentra que un 12,3% dijo que había consumido en el 2021, mientras que, si los padres son permisivos hacia el consumo de marihuana, éste aumenta a 53%”

¿Cuál es la diferencia? En el tema alcohol “hay más naturalización del consumo en el hogar, por lo tanto, el impacto es menor”. En el caso de la marihuana en los adolescentes se reduce “5 veces”, de acuerdo a la respuesta de los estudiantes consumidores durante el pasado año. El consumo es menor cuando hay “menos permisividad, menos tolerancia, en los padres”, indicó Ramírez.

La gran mayoría de los estudiantes no consume marihuana (19% consumió en el 2021), los padres que no ponen límites, o no son claros con las pautas de conducta al respecto, de alguna forma habilitan mayores consumos, aunque no sea directamente, expresó la socióloga.
Es en el hogar donde los niños tienen la primera socialización con cualquier sustancia, tanto legal como ilegal, por eso es fundamental el comportamiento de los padres con las distintas sustancias: en  qué momento se toman, en qué condiciones, cuál es el límite. Y el niño aprende observando a los adultos, incluso hasta en el consumo de medicamentos.
En los hábitos de consumo “la primera experiencia suele estar en la casa, después habrá otras socializaciones. Y cuando son adolescente también son partícipes de otras instancias, como el entorno y el barrio, aunque el hogar sigue siendo fundamental”.

El tabaco 

Tuvo una gran caída hasta el 2018 y volvemos ahora a tener una nueva caída, no es muy pronunciada, pero es relevante porque hay menos adolescentes consumiendo tabaco. A su vez, comienzan el consumo un año más tarde en promedio y eso también es importante porque cuando más temprano se inicia el consumo aumenta la probabilidad de consumos. Retrasar un año el inicio no es poca cosa, señaló Ramírez.

Bebidas energizantes

Su consumo no tiene límite de edad, se puede ver a cualquier adolescente sacar de las heladeras de los comercios esta bebida y mientras los adultos toman alcohol ellos ponen en la mesa latas de energizante. Falta información en los padres sobre los riesgos de esa bebida, se trata de un estimulante por el alto contenido de cafeína que posee. Quizá los adultos tengan que saber más sobre los efectos que provoca en el sistema nervioso central, y más cuando lo combinan con alcohol. La mezcla enmascara los efectos del alcohol, “permite tomar más, y llegan a niveles de intoxicación más rápido, consumen mucho más alcohol”

Tranquilizantes

La profesional señaló que el consumo de tranquilizantes sin prescripción médica, alcanza al 10% de los estudiantes. Cuando les preguntamos dónde los obtuvieron encontramos que 3 de cada 10 nos dicen que fueron dados directamente por los padres y 4 de cada 10 lo tomó en la casa.

Más consumidoras las mujeres

Tanto en el alcohol como en los tranquilizantes, marihuana, y el tabaco, se nota un mayor consumo en la mujer. “Nuestra   hipótesis es que tal vez sea una manifestación más que da cuenta de nuevas definiciones, las mujeres van tomando comportamientos de más riesgo, de más igualdad con los varones, es probable que luego de esta etapa más experimental y fermental, que es la adolescencia, el consumo entre varones y mujeres vuelva a equipararse”, consideró Ramírez.

Nota: La encuesta se realiza cada 2 años. En el 2022 se presentaron los resultados del 2021, la misma se realizó en aulas de enseñanza media a 5096 estudiantes de todo el país (Gráficas JND).

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