A 87 kilómetros de la ciudad de Salto se encuentra la Colonia General Líber Seregni. Para llegar a la misma se debe transitar por la Ruta 3 hacia Bella Unión, doblar en la Ruta 31 a la derecha, atravesar los poblados Palomas y Saucedo y virar hacia la izquierda atravesando un predio privado. La cooperativa Saupa administra una de las cinco fracciones del predio y articula esfuerzos sus socios con los del sector público. La colonia General Líber Seregni fue creada en el año 2008 y está delimitada a la izquierda por el Tangarupá y a la derecha por el Río Arapey. Ocupa una superficie de 4.653 hectáreas y está integrada por cinco emprendimientos productivos, involucrando aproximadamente a 90 trabajadores rurales.
Las mejoras realizadas en las cinco fracciones se financiaron con aportes de los colonos y con fondos provenientes del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP), particularmente a través del Proyecto Prevención de los Efectos de la Sequía. Las obras en los predios se han focalizado hasta el momento en la incorporación de alambrados fijos y eléctricos para subdivisiones de los campos y en la obtención de agua que se almacena y distribuye a los distintos potreros, destinada principalmente al consumo de los animales.
Por otra parte, MEVIR construyó viviendas y un salón de usos múltiples para los cuidadores responsables de los distintos predios. La mayoría de los colonos son asalariados rurales y por lo tanto no trabajan todos los días en la colonia. Además la colonia presenta importantes dificultades de acceso, ya que la caminería está en muy mal estado y el ingreso a la misma requiere atravesar un predio privado. El Instituto Nacional de Colonización (INC) mantiene un juicio con el dueño del predio privado con el cometido de lograr un camino oficial de acceso, luego de pagar una indemnización acorde a los precios de mercado. Ello permitiría asimismo que UTE pueda tender líneas eléctricas para instalar el servicio de luz a los colonos.
Cooperativa Saupa – Una de las fracciones de la Colonia General Líber Seregni es ocupada por la cooperativa Saupa, que debe su nombre a los poblados de Saucedo y Palomas, de donde provienen sus nueve socios. El presidente de la cooperativa, Luis Alberto Monzón, detalló a la Secretaría de Comunicación que los asalariados rurales que integran el emprendimiento carecían de tierra y cada uno llevaba sus animales a pastorear al costado de los caminos. En la actualidad la cooperativa se dedica a la producción ovina y bovina. “Cuenta con 1.200 lanares y 900 vacunos”, precisó Monzón. En cuanto a la gestión del ganado vacuno, expresó que «se trata de mantener las hembras en condiciones de parir y se venden los machos antes de su primer año, al igual que las vacas viejas».
Parte de los animales son propiedad del conjunto de la cooperativa mientras que otra parte fue aportada por los integrantes al conformarse la cooperativa. Por otra parte la cooperativa cuida el ganado de otros asalariados rurales que no tienen campo y percibe por ello una especie de renta. “La cooperativa Saupa ha recibido un apoyo muy intenso de Colonización cuando arrancó; nos brindó capacitación en materia de cooperativismo y nos dio un técnico para asesorarnos sobre el movimiento de animales y cuidado de los suelos”, puntualizó el colono cooperativista. “Cuando llegamos aquí no sabíamos ni siquiera reunirnos”, agregó.
Monzón agregó que el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) también brindó asesoramiento al proyecto y el MGAP contribuyó en la instalación de un pozo semisurgente y de una bomba para proporcionarle agua al tanque australiano que abastece los bebedero de los animales. “El ministerio también apoya la realización de praderas y a través del Plan Ovino se compraron 100 nuevas ovejas para la cooperativa”.
“Ahora se necesita asesoramiento para tratar las enfermedades de los animales y para plantar. Uno siempre está aprendiendo, porque aunque se haya criado en la campaña no sabe ni la mitad de las cosas”, concluyó el emprendedor.
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