El Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración divulgó recientemente un trabajo sobre la evolución del ingreso y su distribución en Uruguay luego de la crisis generada por la pandemia. El trabajo, que fue elaborado por los economistas Mauricio De Rosa, Guillermo Sánchez, Andrea Vigorito y Joan Vilá, concluye que luego de la crisis de covid-19 “la sociedad uruguaya se volvió más desigual”.
“Por lo tanto, recuperar los niveles de desigualdad personal y de participación relativa de la masa salarial y la masa de remuneraciones laborales puede considerarse un primer objetivo necesario para la reducción de los niveles de desigualdad. Sin embargo, la concentración de los ingresos ya presentaba marcados signos de estancamiento desde mediados de la década pasada”, apunta el informe.
En esta línea, se señala que, aunque a partir de fines de 2021 el Producto Interno Bruto (PIB) de Uruguay superó los niveles previos a la crisis de la pandemia, “la evolución no se tradujo en mejoras distributivas”.
“Esta situación contrasta con la tendencia regional, pues solo en otros tres países los niveles de desigualdad no retornaron a los valores previos. Entre 2019 y 2023, el coeficiente de Gini de concentración de los ingresos de los hogares pasó de 0.382 a 0.390 [índice entre 0 y 1. El 0 corresponde a igual ingresos para todos y el 1 la completa desigualdad]. Aunque parezca un movimiento pequeño, este aumento es relevante dado que es un indicador ‘difícil de mover’”, se añade.
Aunque hubo una regresión entre 2019 y 2023 en la evolución de los ingresos de los hogares, la publicación marca que la afectación de las condiciones materiales para la población uruguaya no fue igual para todos los estratos sociales.
“Mientras que el 95% inferior [en los estratos por ingreso] experimentó una disminución en su poder adquisitivo, el 5% superior lo aumentó. Sin considerar a ese 5%, el ingreso promedio de los hogares cayó 2,6%. Una vez más, la sociedad uruguaya emerge de una crisis con mayor disparidad en las condiciones de vida de la población, aspecto que, en este caso, también se ilustra con la conocida evolución de la incidencia de la pobreza, cuyos niveles tampoco retornaron a los de 2019”, consigna el informe.
Posteriormente, el trabajo realizado por los investigadores se enfoca en una de las variables que afecta la distribución del ingreso: la evolución de la participación de la masa salarial en el PIB.
- Fuente: Montevideo Portal
Sé el primero en comentar