El Poder Ejecutivo modificó el decreto que establece medidas de prevención contra las encefalopatías espongiformes transmisibles, conocidas popularmente como «mal de la vaca loca». «En el caso de los productos envasados, el envase deberá ser de forma tal que reúna las condiciones para preservar y garantizar la inocuidad del producto así como evitar la contaminación cruzada con los productos prohibidos por Servicios Ganaderos». La normativa regula la elaboración y depósito de alimentos para rumiantes, la materia prima con la cual se elaboran esos alimentos, el acondicionamiento y envasado y la identificación. Todos estos procesos estarán bajo la inspección de la Dirección General de Servicios Agrícolas (DGSG).
El decreto establece que «cada partida elaborada de alimentos para rumiantes deberá estar debidamente identificada para garantizar la trazabilidad de la partida hasta su consumo; esta debe estar impresa en el envase, etiqueta o rótulo identificatorio en los alimentos envasados, o en la boleta de contado o remito cuando su transporte sea a granel».
Las encefalopatías espongiformes transmisibles (EET) fueron reconocidas y definidas por primera vez en 1986, en el Reino Unido. Posteriormente, fueron encontrados casos de “vaca loca” en Canadá y Estados Unidos en 2003 y en el año 2007, en Francia. La Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE, por su sigla en inglés) cuenta con protocolos para la prevención y el control de la enfermedad.
“El mal de la vaca loca” se transmite entre bovinos por la alimentación con desechos de otros bovinos procesados, a través de la cual se consume una proteína patógena. Para evitar la enfermedad, se impone la eliminación de todo tejido nervioso y linfático visible durante el procesado de alimentos con destino al consumo humano. Este decreto complementa las medidas adoptadas para evitar la aparición de encefalopatía espongiforme bovina.
Uruguay fue declarado país libre de aftosa con vacunación, de riesgo insignificante para la encefalopatía espongiforme bovina (vaca loca) y este año obtuvo el reconocimiento de país históricamente libre de peste equina.
Estas declaraciones fueron suscritas durante la 81.ª Asamblea Mundial de Delegados de la Organización Mundial de Salud Animal (OIE), según lo expresado por el director general de Servicios Ganaderos del MGAP, Francisco Muzio, en mayo de este año. En la oportunidad, el jerarca dijo que Uruguay es valorado como un país que cumple con sus reglamentaciones sanitarias y ofrece garantías
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