«La promulgación de la ley contra el tabaquismo motiva que Uruguay tenga que enfrentar a poderosos intereses económicos, pero estamos orgullosos de que no han podido doblegarnos», resaltó el director general de Salud, Jorge Quian, en el Encuentro de Cooperación Sur-Sur y Triangular sobre Control del Tabaco, que convoca hasta este jueves en Montevideo a representantes de unos 40 países y organismos internacionales.
Como forma de inaugurar el intercambio entre los participantes del foro iniciado el martes, Quian señaló que Uruguay asumió la responsabilidad de tratar la problemática del tabaco.
«Este país fue capaz, en 2008, de redactar una norma cuyo objeto es proteger a los habitantes de las devastadoras consecuencias sanitarias, sociales, ambientales y económicas del consumo de tabaco y de la exposición al humo del tabaco», dijo.
«La promulgación de esta ley fue el motivo por el que nuestro Estado se tiene que enfrentar a poderosos intereses económicos, pero estamos orgullosos de que no han podido doblegar a los uruguayos», sentenció el director del Ministerio de Salud Pública en la primera reunión internacional tras la aprobación del documento final de 2015, que contiene los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) asumidos el domingo por la Organización de las Naciones Unidas.
El foro fue convocado para discutir e intercambiar nuevas ideas de cooperación en el control y prevención del consumo de esta sustancia en el contexto de la Convención Marco sobre Control del Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
Cuenta con el auspicio del Ministerio de Salud Pública – Centro de Cooperación Internacional de Control de Tabaco, la cancillería, la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI), el Secretariado de la Convención Marco para el Control del Tabaco, la Organización Panamericana de la Salud/OMS y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Quian seleccionó entre los 17 ODS planteados en la ONU algunos para graficar el alcance del acuerdo. «En el número 3 expresa la necesidad de que se garantice una vida sana y se promueva el bienestar para todos, en todas las edades» y en el inciso 3.4 se expresa como meta que «para 2030 se reduzca en un tercio, tomando las estadísticas de 2015, la mortalidad prematura por enfermedades no trasmisibles mediante la prevención y el tratamiento y promover la salud mental y el bienestar».
También destacó que los países participantes acordaron «fortalecer la aplicación del Convenio marco de la OMS para el Control del Tabaco en todos los estados, según proceda».
«Esto fue aprobado entre el 25 y el 27 de este mes y ustedes están aquí hoy, comenzando un trabajo en plena coincidencia con la Asamblea General de la ONU y con los Objetivo del Desarrollo Sostenible», valoró, referido a las autoridades y especialistas presentes.
«En nuestro rol de autoridad sanitaria debemos recordar que el tabaco no solo enferma a quien lo consume”, advirtió. “Podemos decir, desde el punto de vista epidemiológico, que a través del humo del tabaco esta es también una enfermedad trasmisible», sostuvo.
Manifestó, además, el deseo de que esta «epidemia gigantesca, que es el consumo de tabaco», sea reducida y que se profundice la acción internacional «a fin de alcanzar mejor salud para todos los habitantes del planeta», concluyó.
Por su parte, Gustavo Pacheco, representación del Ministerio de Relaciones Exteriores, destacó la trascendencia del encuentro para Uruguay y resaltó que el trabajo procura como meta fundamental proteger al ser humano sin que haya intereses que «crucen esta definición realmente civilizatoria».
La ley antitabaco fue una experiencia democrática y profunda en Uruguay, avalada por la adhesión de la comunidad, enfatizó.
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