En los comienzos de la década del 70 llegué a Tacuarembó, para ejercer mi profesión de Escribano y me encontré con un puñado de buenos colegas y entre ellos a un referente de referentes del notariado local, el Escribano Texidor. Esta afirmación no es vacía de contenido o por no estar hoy entre nosotros, está avalada, por la convicción generalizada de la Sociedad de Tacuarembó de ésa época y en un concepto arraigado, de que para comprar un bien el Escribano indicado era Texidor.
Lo destacó su ejercicio notarial original, por la capacidad y la dedicación que sus documentos aportaban a la seguridad jurídica.
En lo personal su humildad era notoria al dar un asesoramiento a los colegas en problemas jurídicos complejos. No lo hacía desde su jerarquía como notario experiente sino que sugería una solución respetando al colega y no haciéndolo sentir inferior.
El colega practicó la excelencia en el desempeño profesional, no era de medias tintas ni de trabajo a la ligera. Nunca puso la remuneración del trabajo ante que la seguridad jurídica. Tuvo siempre un plus especial que fue su honestidad e hizo carne en su tarea el principio que dice “mi honestidad nivelará mis pasos”.
Trataremos como colegas de hoy y de siempre, emular tu ejemplo y tus documentos, que nos quedarán como legado para el notariado local. Gracias Escribano Texidor por haber sido como fuiste y haber jerarquizado con tu presencia nuestra profesión.
Escribano Pablo Inthamoussu
– Escribano José Alberto Olímpico Texidor Rodríguez, falleció a la edad de 88 años, en la ciudad de Maldonado el 10 de julio de 2016.
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