Si Estados Unidos se embarca en una discusión por una posible “reparación” a los descendientes de esclavos propuesta por la izquierda 170 años después de la Guerra Civil (no se menciona los linchamientos que siguieron después y no es necesario ser un genio para saber cómo terminará esta discusión nacional ahora de moda), podría empezar por hacer algo para reducir el racismo actual, no aumentarlo; podría comenzar por reparar a las víctimas de los numerosos y sangrientos golpes de Estados en diversas partes del mundo que sus gobiernos perpetuaron, promovieron o apoyaron, todos reconocidos por sus propios documentos desclasificados.
Para no entrar a hablar de guerras criminales como la más reciente de Irak o los cientos de prisioneros que fueron torturados en Guantánamo por una década antes de ser declarados inocentes y sin compensación alguna.
Muchas de estas víctimas y muchos de sus hijos todavía están vivos, porque toda esa barbarie no fue cometida hace un siglo sino más bien ayer, en términos históricos.
Claro que no daría ninguna fortuna para compensar una mínima fracción de tantas víctimas y lo mejor es distraer la atención planteando imposibles.
JM, abril 2019.
Querido Yorugua….Hermano de Tacuarembo, pagos donde pasé un exilio temprano allá por el 77´. Ya te había leído en Página 12 pero en verdad no podía apreciar bien la calidad de tu pluma. Sos un viento fresco, muy exacto, bien informado y con el suficiente tino para no descarrilar ideologicamente. Estaba muy caliente con muchas notas sobre Venezuela y México que aparecen en «Viceversa Magazine» y me vinistes a alimentar el alma.Ahora descubrí esta página «Tacuarembó 2030», excelente información y presentación. Gracias.