PASO DE LOS TOROS Y PUEBLO CENTENARIO: En acto conjunto donde habló el intendente duraznense

Las dos localidades conmemoraron la Jura de la Constitución donde el orador fue Carmelo Vidalín, que subrayó el desarrollo en la zona.

Pueblo Centenario, en el departamento de Durazno fue escenario de la celebración del acto por el 189 Aniversario de la Jura de la Constitución de la República.

La actividad -en una jornada multitudinaria- fue organizada por la Junta Local de Centenario, conjuntamente con el Municipio de Paso de los Toros, donde hubo palabras del Secretario de la Junta Local, Eduardo Bovio, del Alcalde de Paso de los Toros Juan José López y del Intendente de Durazno, Carmelo Vidalín.

Seguidamente se efectuó un desfile con participación de instituciones de la zona y unidades del Ejército Nacional, pasaje de aviones y show musical.

Vidalín: «Fiesta de reflexión»

“Hoy es un día de fiesta, festejamos, conmemoramos, como muy bien decían quienes hicieron uso de la palabra con anterioridad a nosotros, esta es una fiesta de la región, de Paso de los Toros, de Centenario; de Centenario y Paso de los Toros, como región, que nos separa un puente, o nos une un puente”, dijo en el inicio de su oratoria, Vidalín.

“Festejar, conmemorar es evocar las cosas lindas que nos ha legado la historia, pero yo quiero aprovechar este momento en que están todos los vecinos de Paso de los Toros y de Centenario, para reflexionar”, dijo, saludando la presencia de las autoridades, medios de comunicación y de los ciudadanos presentes en gran número.

“Me voy a detener un instante en un momento en el que también aquí en el interior nos ha llegado también lo que es el vértigo de la prisa, vivimos apresurados, no tenemos tiempo para compartir con nuestra familia; hoy seguramente este acto, esta recordación y este momento sirve para reencontrarnos y mirarnos la cara vecinos que estamos en los mismos pueblos, llámese Paso de los Toros o Centenario y que quizás por vivir apurados como vivimos y a veces hasta con un afán materialista que supera los espiritual, no nos vemos; no somos capaces de conjugar ese sentimiento de buena vecindad que debe existir entre todos nosotros”.

“Aprovechando este momento en que hay miles de ciudadanos de un lado o de otro de nuestro río Negro, en este momento histórico que por primera vez se realiza en forma conjunta entre Paso de los Toros y Pueblo Centenario, que en realidad son, deben ser una misma cosa en cuanto a sentimiento de unidad por lo que es esta región.

Quiero aprovechar este momento para reflexionar en voz alta y reflexionar implica detenerse a pensar, a analizar, a no dar respuestas de autodefensa o respuestas de crítica, sin saber escuchar y atender al otro que es nuestro semejante, nuestro igual, que puede diferir en su pensamiento con respecto al nuestro, pero que siempre tiene cosas importantes para aportar”.

“Este momento debe ser de reflexión y de análisis y para no decir una palabra de más y utilizar un punto y/o una coma de forma incorrecta, he escrito algunas cosas que deseo reflexionar con cada uno de ustedes y a la vez pido que la compartan con vuestra familia, con vuestros amigos, con vuestros vecinos, con vuestros iguales y que también tengan la valentía de que cada vez que nos encuentran aquí en este nuestro querido Centenario, se acerquen a nosotros, para discrepar, para aportar, para construir sobre la base de esta reflexión que hemos escrito y que queremos compartir con ustedes”.

En el año 1813, dijo Vidalín “el Uruguay tuvo el privilegio de ser un pueblo que se rigió por una Constitución. ¿Cómo es eso, si la Constitución es de 1830? Lo que pasa que ese espíritu viene desde el gran (José Gervasio) Artigas que ya en las Instrucciones del Año XIII reclamaba que se dictara una Constitución para todas las Provincias del Río de la Plata y para preservar los derechos de los ciudadanos, para fundar la República y tirar la monarquía absoluta abajo, para organizar un sistema político basado en la división de poderes”.

“En 1830, después de dos décadas de lucha, los Orientales consiguieron su objetivo, de decidir su propio destino y cedieron una Constitución, la de 1830 y los que vivieron en esa época valoraron tan exactamente la importancia de tenerla, que desde entonces y hasta el presente, ha sido Fecha Patria, esta Fecha Patria que hoy conmemoramos. Con aciertos y errores la Constitución de 1830 rigió los destinos de nuestro país durante 90 años”.

“En 1919, hace precisamente un siglo, se realizaba la más importante reforma de la Constitución de 1830, esa reforma con acuerdo de los distintos políticos, estableció el voto universal masculino, después también aquí en nuestra región en los límites de Florida, Treinta y Tres y Durazno se llevó adelante el primer voto femenino.

También se estableció el voto secreto, otras garantías de sufragio, que permitieron fundar la moderna democracia, y esa Constitución fue la que llevó, fue la que impidió que continuáramos los Orientales peleándonos en las cuchillas”.

“En 1929, estoy seguro que debe haber incidido mucho el historiador Aizpún sobre la voluntad de nuestro Secretario de la Junta de Centenario, 1929 se toma como fecha de este nuestro Pueblo Centenario justamente porque fue en ese año que se habilitó el puente carretero, allá por febrero y nosotros allá por marzo tomamos esa fecha como fecha de inauguración de este Pueblo”, dijo Vidalín en la oratoria.

Mejores oportunidades de trabajo

“Y llegamos a este 2019, seguramente uno de los desafíos que tenemos por delante será pensar una nueva reforma Constitucional para adaptarla a los desafíos del siglo 21 y especialmente lo que nos interesa a las mujeres y hombres del interior para lograr un país más equitativo, para que este hermoso territorio vuelva a poblarse, que haya oportunidades de trabajo y desarrollo pleno en todos los sentidos y no tengamos que experimentar o sentirnos ciudadanos de segunda.

Personalmente anhelo, sueño, quisiera, que esas voces dulces que nos deleitaron con su poema (en referencia a la lectura realizada por alumnos de escuela 39), que el resto de nuestros chicos de Primaria, de la Secundaria, de nuestra UTU, los que forman parte de la naranja de Centenario, no se nos fueran; que nosotros los gobernantes y nosotros los ciudadanos realmente comprometidos nos diéramos la oportunidad de que en el mañana los pudiéramos disfrutar para experimentar el afecto de nuestros seres más queridos que son nuestros hijos y nuestros nietos”.

Desafíos, con profunda reflexión

“Ese debe ser un gran desafío y ese debe ser también un momento de profunda reflexión”, señaló.

“Tengamos conciencia y debemos ser autocríticos de que estamos en una de las zonas que más ha sufrido el despoblamiento del país a lo largo de todo el siglo 20. Mientras la población del país en un siglo creció más de tres veces; en 1900 éramos un millón y hoy somos algo más de tres millones, el departamento de Tacuarembó no llegó a serlo nada más que un 80 % en crecimiento, y nosotros en Durazno apenas llegamos al 30 % en crecimiento de nuestra población”.

Combatir el estancamiento

Vidalín, llamó a “combatir con todas nuestras fuerzas el estancamiento”, “el vaciamiento, la falta de oportunidades. Nosotros por costumbre, por idiosincrasia, evocando, a mi me gusta evocar  a un poeta duraznense que se llamó Manuel Demetrio Souza y que escribió una obra que se llama “Historia del Hombre Gris”, muchas veces nos alzamos para oponernos a esto y aquello, pero nunca nos hemos unido y este gobernante tampoco ha escuchado que nos unamos para luchar para que lleguen universidades, para que lleguen fuentes de trabajo y para que lleguen inversiones.

Generalmente esas cosas, en lugar de unirnos, nos dividen y nos separan y nos alejan de un horizonte venturoso para esta nuestra región”.

Los grandes saltos, y acá voy a enumerar tres o cuatro momentos históricos de esta nuestra región; los grandes saltos no generan reparos, y es lógico que así sea, demasiado tiempo hemos pasado sin cambios, pero miremos atrás. Miremos lo que nos dice el gran historiador isabelino don Pedro Armúa, que estudió la historia de Paso de los Toros y de toda nuestra región, y que debe de haber sido profesor de muchos de ustedes don Pedro; cierro los ojos y lo veo como un hombre de respeto, de consulta, como un foco de luz, con esa imagen señera, humilde y firme, símbolo de un Paso de los Toros, y don Pedro Armúa decía a través del análisis de la historia, que cuando los ingleses construyeron el puente en 1886 y 87 sobre el río Negro, los tratábamos de gringos; gringos que se iban a llevar la plata para Europa, que los campos se iban a incendiar, había mucha gente que no creía que pudieran vencer el río Negro y sin embargo el puente se construyó y esta zona en pocos años sufrió una transformación enorme.., lean a Armúa, don Pedro es un referente para todos nosotros en esta nuestra región”, invitó Vidalín.

Nudo ferroviario trajo desarrollo

“El puente se construyó y ese Paso de los Toros que en aquella época era solo un rancherío, en pocos años tuvo una explosión, naciendo esa denominación que hoy le damos también de Santa Isabel, y se transformó en un nudo ferroviario que en aquel momento nos trajo riqueza y desarrollo y al cual hoy pareciera que nos oponemos. Se establecieron saladeros, vinieron unidades militares que valoramos, se construyeron enorme cantidad de casas que aún conservan, se conservan con dignidad.

Sin ese puente, sin esas inversiones extranjeras, sin esa tecnología de punta que usaban los británicos, no hubiera nacido realmente Santa Isabel Paso de los Toros como una población pujante que lo fue y que volverá a ser”.

Más adelante Vidalín, agregó: “no hablemos de lo que pasó, pero si tengamos en cuenta lo que fue la valoración de las tierras, el valor de los campos se multiplicó por varias veces gracias al tendido del ferrocarril, la velocidad de las comunicaciones desencadenó un desarrollo comercial, en servicios y también en cultura”.

La construcción de la represa

“Pasó medio siglo desde aquellos 1886 al 87 y allá por los 1940 y 1950, esta región volvió a ser el escenario de un nuevo desafío y el río Negro, nuestro río Negro fue otra vez el protagonista, la construcción de la represa hidroeléctrica del Rincón de Bonete, o ustedes creen que cuando se construyó la represa todos aplaudían?, Cuando se construyó la represa del Rincón del Bonete se levantaron en contra miles y miles de voces porque se iban a invadir muchas hectáreas de campo productivo por culpa del lago.

Se perdió mucha tierra fértil, claro que sí que se perdió mucha tierra fértil, pero pregunto cuánto ganó nuestro país, cuanto ganó nuestra región en lo que tiene que ver con independencia energética, con crecimiento y con desarrollo; cuánto le permitió crecer desde un punto de vista industrial a este nuestro país esa generación de energía?; es cierto, no se cumplió con el proyecto de crear un Centro Industrial junto a la represa, que de haberse cumplido podía haber generado miles de puestos de trabajo y lamentablemente el río Santa Lucía incidió para los que los uruguayos, como ilustra muy bien el Licenciado Oscar Padrón, siguieran mirando al mar y de espaldas al interior”.

Pero tampoco podemos negarnos que Paso de los Toros y Centenario, crecieron gracias a todo el movimiento que generó la construcción y puesta en marcha de esa nuestra represa del Rincón del Bonete”, subrayó el intendente.

Exigir garantías y control

“Tenemos ahora una enorme oportunidad. No tengamos miedo. En el Uruguay existe la libertad, el Uruguay es un país democrático, en donde todos y cada uno de nosotros tenemos los mismos derechos de los que nos acordamos siempre, pero también tenemos las mismas obligaciones de las que nos olvidamos muchas veces”.

“No tengamos miedo a enfrentar el futuro, el futuro depende del compromiso que asumamos cada uno de nosotros. Pidamos todas las garantías, actuemos como una sociedad responsable, moderna, que quiere participar del desarrollo, que exige saber, que exige conocer, que exige controlar, pero seamos objetivos en dar en el blanco, tenemos que acertar en el blanco, y el blanco implica que tenemos la oportunidad de alcanzar trabajo digno para nuestra gente y evitar que nuestros jóvenes, que nuestros niños, tengan que partir de esta nuestra región si anhelan un futuro venturoso”.

“Nuestro enemigo no es el crecimiento, el desarrollo, los cambios, no señores, nuestro enemigo es el estancamiento, el atraso, el ver que otras zonas del país explotan en crecimiento y nosotros no, y nuestros hijos se nos van y yo no quiero, como seguramente ninguno de ustedes quieran, que nuestros hijos se nos vayan.

Sueño con un Paso de los Toros, con un Centenario; con un Centenario Paso de los Toro como una única ciudad, unida no por un puente, por varios puentes, no que viva de una sola actividad, sino que a la ganadería y a la agricultura, que han sido nuestro sustento se le sume la pasta de celulosa, se desarrollen las aguas termales, llegue el desarrollo universitario y tecnológico”.

“Sueño, sueño despierto y comprometido con una región a la que amo y por eso hoy exhorto a que pensemos y que analicemos que el tren muchas veces pasa solo una vez y debemos tener la inteligencia, la fuerza y la autoestima para saber tomarlo”, concluyó Vidalín.

Extraído de: Portal Caras&Caretas

  • Foto destacada: Semanario Centro

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