El martes 18 de agosto, mientras trabajaba, me llega un mensaje de una vecina «se están llevando el Cerro por atrás«.
Hace unos días les comenté a estos vecinos, que un hombre que dijo representar a la empresa Ramón Álvarez, que realiza el baypass entre rutas 31 y 26, llegó a mi casa, preguntando por el Cerro, con intención de pagar para extraer material. Le respondí que no estaba de acuerdo con esa extracción y que este lugar es un bien patrimonial. Se fue diciéndome que de algún lado tenía que sacar para la ruta.
Pues este lunes 17, decidieron entrar por un campo del lado de atrás del cerro “aparentemente abandonado”. Calladamente, comenzaron a abrirse paso por el monte nativo, abriendo una calle ladera arriba, dejando el tendal de árboles a su paso.
Si alguien por allí pasara no te percataría, ya que convenientemente, queda oculto por el propio monte. Pues algún vecino si lo notó, y comentó a otro y así que fuimos a ver. Sacamos fotos, averiguamos, avisamos a otros, informamos por radio. Con astucia esta empresa rescata material para que una obra, le genere buenos réditos.
Antes, aún hoy, extraen de un campo un poco más al oeste por esta misma zona. Otro sitio que desde hace años algunos vecinos cuestionan si tienen los permisos ambientales, y si pagan impuestos. Pasan muchos camiones al día, a gran velocidad, sin respetar al resto de los que transitamos y vivimos aquí. Quienes tenemos que andar con cuidado de no ser atropellados, y además sufrimos con la tierra que nos nubla la visión y lastima los ojos, además de tener que soportar que salimos bañados y limpios, y en el trayecto al pueblo, tenemos una costra de tierra.
El pasto, huertas, ropa lavada, todo, a varios metros del camino tapados de tierra. El camino, que arreglan para transitar ellos, rápidamente se ve estropeado, y las banquinas donde salen para cruzar dos a la vez, también.
En nombre del » progreso» y de generar » fuentes laborales» arrasan con los recursos naturales y la biodiversidad de nuestra tierra. Además de cambiar nuestras formas de vida, y tranquilidad
Este Cerro de la Aldea, patrimonio arqueológico, bastión de esta localidad, no puede tocarse, modificando la biodiversidad, paisaje y hasta condiciones climáticas.
Seguimos alertas. Cuidamos nuestro cerro y nuestra tierra.
(*) Nilda Amaral (Vecina del Cerro de la Aldea) abuelaluna@gmail.com
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