El director de Sanidad Animal, Federico Fernández, fue consultado por la Secretaría de Comunicación sobre los niveles de brucelosis en el país. Al respecto, sostuvo que nuestro país presenta una prevalencia “muy baja” de esta enfermedad, y que es uno de los países con menores registros en la región. Informó que en 2011 se realizó 1 millón y medio de exámenes entre los 11 millones de bovinos que tiene Uruguay. Fernández explicó que la brucelosis bovina se constató en el país desde hace muchos años y de acuerdo a cómo se presenta, se modifica la campaña sanitaria que se aplica. El número de casos se mantiene estable y es muy bajo, 0,2%, dijo Fernández
y agregó que de los 50 mil establecimientos que tiene el país la enfermedad se presenta solo en 350. “Es un número reducido de establecimientos y de animales”, aseguró el jerarca.
Agregó que se trabaja hacia la erradicación, meta que consideró “muy ambiciosa” pero posible, ya que, según dijo, algunos países la alcanzaron. En ese sentido, comentó que Uruguay recibe la visita de consultorías externas de países que ya lograron erradicar la enfermedad y con dicho aporte, se apuesta a redefinir la campaña.
Con respecto a la región, Uruguay tiene una prevalencia muy baja de brucelosis indicó Fernández. Agregó que el año pasado se tomaron más de un millón y medio de muestras de un total de 11 millones de bovinos, con lo cual se pretende separar al animal enfermo del rodeo. Independientemente de esto, se realiza un muestreo serológico en 600 establecimientos a 27 mil vacunos aproximadamente, lo cual permite tener una idea de cuáles son los niveles de prevalencia de la enfermedad.
Detección de la enfermedad – La brucelosis es una enfermedad ampliamente difundida en América Latina, aunque no se conoce con exactitud el grado de incidencia en cada país. Afecta el ganado bovino, ovino, caprino y porcino. Para detectarlo el primer paso es tomarle pruebas serológicas de sangre al animal, potencial portador, y una vez confirmado el diagnóstico se envía al frigorífico para su faena inmediata. En estos casos, se le paga al frigorífico un sobreprecio proveniente de un seguro recaudado entre los productores, con el fin de disminuir las pérdidas que produce la faena anticipada.
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