Poco a poco te van metiendo el indigenismo en el Uruguay, en un país de variación demográfica extrema. Los mismos que te militan diciendo ser nietos de inmigrantes un día, la semana siguiente te reclaman dos mil hectáreas de campo como bisnietos de charrúas.
Sorprendente fue el Twitter del Instituto derechos Humanos uruguayo “Día de la Nación Charrúa y de la Identidad indígena La INDDHH adhiere a la conmemoración del genocidio de Salsipuedes el 11/4 de 1831 y exhorta a adoptar medidas reparatorias que reconozcan la vulneración histórica de los DD.HH. de los colectivos de pueblos indígenas en Uruguay”. ¿Será así esta afirmación? O tiene algo de tinte político, como construyendo un relato, preparando escenarios.
Los charrúas fueron un pueblo amerindio que en el siglo XVI vivía en el sur de lo que hoy es Uruguay. En el siglo XVIII los charrúas ampliaron su territorio en su guerra contra guaraníes misionero. A raíz de ese avance se fusionaron con otros pueblos que ocupaban esos territorios. El término charrúa pasó a ser el denominador común de ese conjunto de pueblos, por lo que hoy en conjunto se los suele autodenominar como nación charrúa.
Esta resolución del INDDHH, en lo personal me parece un anacronismo
¿Se pueden juzgar hechos sucedidos en 1831 con los parámetros del año 2021?
Nación Charrúa ¿? Este relato posee base seria ¿?. Un nuevo relato de quienes tuvieron en el gobierno 15 años basado en las premisas del Foro de San Pablo (ítem: Discriminación y Derechos Humanos) para alimentar su propia cultura y fuente de su influencia.
Como contrapartida a ese relato tenemos que No es porque sí que casi todos los accidentes geográficos tienen nombre guaraní y no charrúa, empezando por la expresión “Uruguay” “Tacuarembó” “Batoví” “Hum hoy río Negro” , etc. Si hablamos de nación hablemos de los miles de Guaraníes que vivían en Uruguay.
Los charrúas vinieron a dar al este del Uruguay por las campañas militares contra ellos en Santa Fe y la mesopotamia argentina. “Se entendían desde 1680 con los portugueses de la Colonia del Santo Sacramento, contrabandeaban para ellos y hacían esclavos, que vendían a sus ocasionales socios europeos. Hay documentos fehacientes que lo prueban”, señala Daniel Vidart (antropólogo y escritor uruguayo).
Uno de los más expresivos es el informe del oficial de Blandengues José Artigas, que denuncia al Virrey que los charrúas “se hallan unánimes con los portugueses” y que “no les roban haciendas ni menos dan muerte a ninguno de la nación referida y venden lo que roban estos charrúas en nuestras Estancias a los mismos portugueses a cambio de trato de Aguardiente, Lienzo de Algodón, Tabaco, hierra y cuchillos”.
El mito Charrúa fue un mito europeizante para decir que muertos los Charrúas, Uruguay era un país europeo.
Tiene que llegar el día que debamos tener cuidado con los relatos para fabricar reivindicaciones como en los vecinos, Chile, Bolivia, Paraguay, que toman tierras e incendian propiedades privadas con el cuento que eran de sus antepasados.
(*) Publicado en semanario “El Nuevo Batoví”
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