El MGAP y la FAO coordinan acciones desde 2011 en un plan estratégico para impulsar la producción citrícola. Construir una institucionalidad acorde con las necesidades del sector, generar bienes públicos cuyo beneficio incorpore a pequeños y medianos productores y trabajadores son algunos objetivos para 2012 difundidos en un informe de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria. Un Decreto del Poder Ejecutivo que aumenta a 4% la tasa de devolución de impuestos indirectos a las exportaciones de frutas cítricas y jugos.
El objetivo es disminuir el endeudamiento con el BROU de las empresas con dificultades financieras, no obstante lo cual el beneficio es para todas las exportaciones. Aumento en el monto de la prefinanciación de exportaciones. Avance del Plan de Trabajo en Citricultura e implementación del Plan Estratégico aprobado a fines del año 2010. El objetivo es comentar los avances, desafíos y propuestas que van dando contenido al Plan Estratégico en citricultura en las siguientes áreas temáticas: La instrumentación de esta medida se realiza a través de un convenio firmado por cada una de las empresas con el BROU por el cual la totalidad de los certificados emitidos por la DGI se destinan a abatir endeudamiento con el BROU, inserción internacional, saneamiento, investigación y desarrollo y sustentabilidad social.
Inserción internacional – Según el documento, el pretende la apertura del mercado de Estados Unidos, para lo cual los distintos servicios del MGAP —Dirección General de Servicios Agrícolas y la Unidad de Asuntos Internacionales— y el Ministerio de Relaciones Exteriores trabajan en forma conjunta con el sector privado. Este plan de trabajo incluye: variedades, logística, calendarios, calidad interna, calidad externa, aspectos técnicos, residuos e inocuidad. Desde hace varios años a través de Uruguay XXI (en coordinación con la UAI del MGAP) se apoya financiera y logísticamente la participación de los exportadores de cítricos en las ferias internacionales.
Saneamiento de plantas – Los compromisos asumidos por el MGAP con los proyectos y programas de nuevas plantaciones impulsados desde el inicio de este año, son sustantivamente superiores a los de años anteriores. Se comienza a construir desde una base diferente y con orientaciones definidas. El documento detalla la pretensión de una situación ideal: aumento de productividad, variedades acordes a las exigencias de la demanda —nuevos mercados y conformidad de los consumidores—, impacto social por mejora en productividad laboral y en la calidad de vida de los trabajadores. Esto se sintetiza en la perspectiva de una nueva década de fortalecimiento de un rubro, con sostenida vocación exportadora. La estructura de viveros existente en el país se prepara para aumentos significativos en la producción de plantas, con las correspondientes inversiones en infraestructura, invernáculos, sustratos, semillas, entre otras.
Investigación y desarrollo – La prioridad en el área de investigación se encuentra en los programas de plagas cuarentenarias (mosca de la fruta, HLB) y apoyo a nuevas líneas de investigación necesarias en apertura de mercados o áreas de desarrollo. En el área de Desarrollo el enfoque está centrado en riego —fuentes de agua, equipos de riego— y plantas —reconversión de montes viejos, nuevas variedades—. También se desarrollarán proyectos de riego con financiamiento Fondo BID, Banco Mundial u otros organismos a partir de 2013. En lo que respecta a plantación, el plan estratégico plantea la necesidad de reconvertir, en un breve lapso, unas 5.000 hectáreas —aproximadamente un 30% de la superficie actual—, correspondientes a montes de muy baja productividad.
Sustentabilidad social – Según el proyecto, está orientada a la atención de dos grupos diferentes de pequeños y medianos productores. El objetivo es interactuar con pequeños y medianos productores, con visitas a los predios para mejor conocimiento de las realidades productivas. El Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (INEFOP) promueve acciones orientadas a trabajadores de plantas de empaque, no obstante no se ha avanzado en propuestas concretas en el caso de los trabajadores rurales y zafrales, que representan una parte muy importante de los vinculados a la citricultura.
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