“Para este Gobierno es un beneficio y no un privilegio que todos los uruguayos nacidos en cualquier parte del territorio tengan igualdad de oportunidades”, dijo Guillermo Fraga, coordinador del Fondo de Desarrollo del Interior de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), al celebrar, junto con 10 vecinos del paraje Cerro Travieso, la llegada de la energía eléctrica y sus posibilidades a esa zona de Uruguay.
En Cerro Travieso, paraje ubicado en el kilómetro 176 de la ruta 31, en el departamento de Tacuarembó, 10 familias se reunieron este jueves 10 en el establecimiento de un productor ubicado sobre la Cuchilla de Haedo para inaugurar la conexión de sus hogares a la energía eléctrica, evento que cambió la cotidianeidad de las familias.
La llegada de la electrificación a los lugares más alejados del medio rural es una tarea que convocó, desde 2013, a nueve organismos del Estado, entre ellos, los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca, de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente y de Industria, Energía y Minería, el Instituto de Colonización, Mevir y la OPP, que están trabajando en el Programa de Electrificación Rural.
En Cerro Travieso se colocaron 16.600 metros de línea de media tensión y 10 subestaciones para 10 clientes. El monto de la obra supera los 4 millones de pesos, de los cuales OPP aporta más de 1,5 millones, UTE un monto similar en materiales y el resto los beneficiarios, mientras que Mevir trabajó en las instalaciones dentro de las viviendas.
Este año se realizarán en total 600 kilómetros de electrificación rural, con una inversión pública de 80 millones de pesos. “Tenemos en cartera 56 grupos que están armados y listos para su aprobación, lo que lleva trámites y dinero, además de la voluntad política de seguir haciendo el esfuerzo por brindar el servicio, pero lo que faltó fue tiempo”, afirmó Fraga, confiando en la sensibilidad gubernamental para continuar con esta política nacional.
También relató historias de vecinos vinculadas al deseo de contar con luz y conexión eléctrica para realizar tareas cotidianas en las ciudades. Consideró que llegar con servicios al Uruguay profundo es una apuesta a las personas, al desarrollo y a la cercanía.
Valoró que la OPP está presente a través de sus distintas herramientas, como la Dirección de Descentralización, el Fondo de Desarrollo del Interior, los programas de caminería rural.
En ese punto, subrayó: “Las mujeres usan la caminería rural mucho más que los hombres en distancias más cortas y en tráficos más intensos, en general, vinculados con los cuidados y la producción”.
Mencionó el programa Uruguay más Cerca que trabaja con pequeños grupos de emprendedores respaldados por la OPP con cursos o ayuda para que esas personas asuman su ciudadanía y sustento a partir de lo que saben y quieren hacer para su futuro.
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