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Entre otros datos relevantes, es necesario que la opinión pública uruguaya conozca que los emprendimientos autogestionados por sus trabajadores en el país son, a excepción de dos o tres iniciativas particulares, cooperativas de trabajo asociado. Las cooperativas de trabajo asociado en el Uruguay representan cerca de 600 empresas de un universo de aproximadamente unas 2.600 cooperativas según datos del INACOOP para el 2014. De acuerdo a los estudios realizados por el Instituto de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de la República durante los últimos cinco años, estas iniciativas tienen menor mortalidad que las empresas de capital para igual tamaño de empresa y sector de actividad productiva y se preocupan bastante más por garantizar los puestos de trabajo que generan. |
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Durante esta fase inicial de creación del FONDES, éste ha tenido como criterio privilegiado apoyar a algunos grandes emprendimientos que además de ser autogestionados, en su mayor parte han sido empresas de capital que quebraron y debieron ser rescatadas por sus trabajadores. Estas no son realidades nuevas, algunas llevan más de 50 años de vida. COPAY, COFUESA (ex-Urreta), Molino Santa Rosa, Molino Caorsi, entre decenas de otras cooperativas son la demostración de que, incluso a partir de esta matriz de empresas recuperadas, el éxito empresarial es posible. Lo que debe advertirse también, es que la mayor parte de los casos que han aplicado a los apoyos del FONDES han sido emprendimientos que se encuentran en sectores de actividad de medio a bajo dinamismo en términos sectoriales. Esto agrega mayores dificultades a las que desde su propia forma de constitución, representan los desafíos de pasar de ser trabajadores en relación de dependencia a emprendedores organizados democráticamente. Entre algunas de las recomendaciones que el movimiento cooperativo organizado le ha realizado al Gobierno, con miras a incrementar el impacto sobre el desarrollo en forma sostenible del país, se encuentran la necesidad de promover un mayor y más sólido tejido empresarial de base cooperativa y solidaria, orientando los objetivos del FONDES al conjunto de la economía social y cambiar el énfasis de las iniciativas a ser promovidas, pasando de la respuesta reactiva frente a eventuales empresas en quiebra a la promoción de reconversiones o nuevas cooperativas en sectores estratégicos o de oportunidad en lineamiento con los estudios prospectivos llevados adelante por CUDECOOP con apoyo del MIEM e INACOOP. Entre algunas iniciativas que sería interesante poder considerar a través del FONDES en una reformulación de su normativa, se encuentran la posibilidad de financiar proyectos cooperativos estratégicos en términos de logística, producción de energía renovable, apalancamiento del sistema financiero cooperativo, reconversión e integración del cooperativismo de consumo, entre otros. Confederación Uruguaya de Entidades Cooperativas (CUDECOOP) |
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