En 2015 trabajan 40 mesas de Desarrollo Rural con participación de 500 organizaciones de productores, asalariados y representantes del sector. “Hay más de 20.000 personas involucradas”, subrayó el titular de la Dirección de Descentralización del MGAP, Ricardo Teixeira. Detalló que los objetivos son luchar por erradicar la pobreza rural y propiciar que la ciudadana desarrolle ideas para el crecimiento del ámbito rural.
“Los principales objetivos son luchar por la erradicación de la pobreza rural y que la ciudadanía quiera participar, brindando ideas para el crecimiento del sector”, aseveró Teixeira, en entrevista con la Secretaría de Comunicación.
Explicó que las Mesas de Desarrollo Rural constituyen ámbitos de diálogo entre organizaciones sociales del medio rural, el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca y otras instituciones públicas, a fin de promover políticas de desarrollo rural.
Estas instancias de diálogo se originaron en 2001, tras un acuerdo entre Uruguay y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), para combatir la pobreza rural. No obstante, el entrevistado acotó que su incidencia en el comienzo fue escasa, entre otras razones, porque solo reunían a los sectores rurales organizados y en las capitales departamentales o ciudades importantes.
Según recordó, esto cambió radicalmente a partir de 2005, tanto en el manejo como en la concepción de esta herramienta, cuyo fin a partir de entonces fue generar soluciones contra las causas que originan la pobreza rural. Fue así que en 2007 se aprobó la Ley 18.126 sobre Descentralización y Coordinación de Políticas Agropecuarias con Base Departamental, que prioriza la participación social organizada y la posibilidad de que los pobladores del medio rural puedan tomar decisión esa través de las Mesas de Desarrollo.
En 2015 funcionan 40 mesas de Desarrollo Rural distribuidas en los departamentos del interior, con la participación de más de 500 organizaciones de productores, asalariados y representantes de comunidades rurales. Actualmente están trabajando 467 organizaciones, pertenecientes 357 productores, 7 asalariados y 83 comunidades.
“No son menos de 20.000 personas las que están involucradas en el trabajo de las mesas”, subrayó Teixeira. Agregó que el ciudadano que quiera acercarse debe integrarse a las organizaciones sociales, porque la forma de participar es a través de los colectivos, pero remarcó que las reuniones son abiertas a la población.
Los principales temas que se promueven en los encuentros se relacionan con vivienda, salud, electrificación, educación, caminería, seguridad, agua potable, ley de ordenamiento territorial, minería, conectividad, transporte de estudiantes hacia los centros de estudio, refugios peatonales sobre rutas y acceso a la tierra.
El aval social a los planes y proyectos presentados por la Dirección de Desarrollo Rural, sanidad animal, trazabilidad, uso y manejo del suelo, créditos fiscales, aplicación de agroquímicos, plan estratégico hortícola, asistencia técnica, emergencias agropecuarias, registro de fuentes de agua del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, ley de compras públicas, registro de productor familiar y seguros agrícolas, son otros temas que se analizan en las mesas.
“Todo lo que se maneja tiene que ver con las necesidades propias de la población. En la medida que se avanza por solucionar un tema, otro aparece en el debate”, mencionó Teixeira.
Remarcó que solucionar el acceso a la tierra es el tema transversal de las 40 Mesas de Desarrollo Rural, para eso, cumple un rol importante el Instituto de Colonización.
Como ejemplo de trabajo articulado mencionó el registro de los productores familiares, que permitió aplicar políticas diferenciales; hay un total de 28.000 inscriptos.
“El futuro de las Mesas es de crecimiento y hay desafíos importantes en los planes territoriales de desarrollo rural en varios departamentos. Los ámbitos están instalados, ahora es el momento de profundizar la participación y descentralización”, aseguró Ricardo Teixeira.
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