El representante en Uruguay de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Giovanni Escalante, calificó como “un hito mundial” el consenso alcanzado entre los jefes de Estado que participaron de la Conferencia Mundial sobre Enfermedades No Transmisibles, que culminó el viernes 20 en Montevideo. Enfatizó que es un “imperativo ético” de la industria reducir el contenido de sodio, grasas y azúcar en alimentos y bebidas.
“Estamos muy complacidos por cómo se ha desarrollado la Conferencia Mundial sobre Enfermedades No Transmisibles”, señaló Escalante, este viernes 20, en el tramo final de la actividad que comenzó el miércoles 18 y congregó a líderes de todo el mundo en Montevideo.
Destacó que “es un hito mundial el consenso que hubo entre todos los jefes de Estado que participaron, porque no es fácil lograr un acuerdo a favor de la lucha contra las enfermedades no transmisibles”.
Valoró positivamente que “todos los países están acordando establecer políticas y regulaciones a favor de una alimentación saludable con medidas de reducción del contenido de sodio, grasas y azúcar, en alimentos y bebidas ultraprocesadas”.
Reconoció que “la industria es necesaria en todos los países, porque es motor para el desarrollo económico”, pero que tienen “un imperativo ético, atender las necesidades de los consumidores y buscar las mejores opciones”.
4Escalante manifestó, el lunes 16, luego de participar de una conferencia de prensa encabezada por el presidente de la República, Tabaré Vázquez, que “la vocación de Uruguay como estado miembro de la OMS de apostar plenamente a la salud es una premisa para el desarrollo”. “Sin salud no hay desarrollo y sin desarrollo no hay salud”, recalcó. Además, en la víspera, Escalante participó de la reunión que mantuvo el mandatario uruguayo con la directora de la OPS, Carissa Etienne.
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